29 enero 2007

Cadena de Plata


Un lazo apenas perceptible
que me acaricia y me ciñe,
como si en verdad pudiera tu piel
rozar mi muñeca...
Delicado tacto de los eslabones
deslizándose cómplices
en cada movimiento de la mano,
dejando fluir en mi interior
corrientes de emociones
quizás prohibidas hoy,
quizás posibles alguna vez...
o en otra vida...
Mientras tanto
siento el regalo de tu contacto permanente
y espero...

4 comentarios:

Alvaro dijo...

Hay regalos que son parte misma de la persona que los hizo. Te comprendo.

Un saludo desde el agua

un hombre virtuoso dijo...

Existen sentimientos que enlazan y unen más que cualquier cadena material. Creo que no hace falta decírtelo, veo que sabes muy bien de lo que te hablo.

senses and nonsenses dijo...

sentimientos que nos atan a personas para siempre.
un abrazo.

José L. Serrano dijo...

gracias por venir a la taberna, es un placer leerte a tio tambien